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viernes, 15 de julio de 2011

Huyendo de lo químico he llegado a lo biológico

Hace ya algún tiempo que lleva en vigor la alerta sanitaria de EHEC (Entero-Hemmorragic E. Coli), una variedad bastante peligrosa de la bastante inócua E.coli que tanto se ha estudiado.

E.coli es una bacteria que vive normalmente en el colon de los animales, al final del tracto intestinal y, por tanto, su presencia en alimentos indica una contaminación fecal de esos alimentos.

Ya escribí un post sobre una duda que tenía: si los bebes al nacer son estériles (nacen sin bacterias tanto en su piel como en su tracto digestivo, esas bacterias tienen que venir de algún lado para colonizar esas zonas del bebe. La idea general es que provienen de la madre en el momento del parto y la lactancia pero existen bebes que nacen por cesárea y no toan el pecho que también terminan teniendo esas bacterias tras un tiempo (mayor que los otros)

Mi duda pues es la siguiente, si esos bebes son colonizados por enterobacterias, y no han nacido por vía vaginal ni han tomado teta ni han estado chupando la caca de otro, de donde provienen esas bacterias.

Mi idea es que son bacterias bastante ubicuas pero que no predominan mas que en un ambiente apropiado para ellas como el colon.

Todo esto viene a cuento de la comentada alerta alimentaria/sanitaria.

Puede una E.coli haber adquirido la información genética necesaria para hacerla enterohemorragica (normalmente un plásmido pero no tengo ese dato) en un ambiente distinto del fecal habitual y posteriormente contaminar la comida que sea (que a fecha de hoy no está claro 100%)?

Desde luego es poco probable por dos razones:

- el número de bacterias en heces es muy grande en comparación can las que se puedan encontrar por casualidad en cualquier otro sitio

- la posibilidad de adquirir ese plásmido es muy pequeña.

Si juntamos las dos, tenemos que es poco menos que imposible.

Así que podemos decir que la contaminación proviene de las heces.

Este dato es bastante verosímil en tanto en cuanto todo parece apuntar que el foco fue una serie de restaurantes/catering ecológicos, de lo cual poco se ha dicho para no perjudicar al mercado.

Y es que estos productos son fertilizados con estiércol animal en lugar de fertilizantes químicos.

Para la elaboración del estiércol, las heces de los animales pasan por un proceso de compostaje en el cual, entre otras cosas, la temperatura sube por encima de 60 grados durante bastante tiempo, matando las bacterias originales de las heces y siendo sustituidas por otras no tan peligrosas. Pero si este proceso no es correcto o no suficientemente largo pueden quedar bacterias fecales.

La probabilidad es pequeña ya que el proceso mismo lo requiere para preparar un compost/estiércol de calidad. Pero claro siempre pueden “pasar cosas raras”

Seguramente esto fue lo que pensaron los responsables alemanes al echar la culpa al pepino español, que crece encima del suelo y es, por tato, fácilmente contaminnado.

Pero parece que finalmente el culpable son unos brotes de una granja del sur de Alemania.

Los brotes son unos alimentos muy interesantes, ya que se comen crudos. Pero suelen hacerse a partir de legumbres que crecen en vainas o a partir de semillas que no tocan el suelo mientras crecen (y las que se caen al suelo no se recogen)

Como pueden contaminarse entonces?

Pues parece que varios trabajadores tuvieron episodios de diarrea poco tiempo antes de aparecer el brote en gran escala.

Personas que buscaban alimentos más sanos (ecológicos), sin pesticidas, ni productos químicos y que, paradójicamente han encontrado otro peligro para la salud, mucho más natural y biológico pero igual de letal: las bacterias.

Y es que la idea de que la industria alimentaria sólo actúa para beneficio propio no es siempre cierta. Muchas de las sustancias de origen químico o procesos que implican nuevas tecnologías son necesarias para evitar o prevenir peligros biológicos, más peligrosas que estas sustancias o procesos de “la vida moderna”

Y es que la vida está llena de peligros, físicos, químicos y biológicos, y unos no son menos peligrosos que los otros. La información, como siempre, es tu amiga.

Como dijo aquel: “el 100% de los fallecidos en los últimos 10 años estaba vivo justo antes de morir luego vivir es la mayor causa de muerte”

Edito según escribo: parece ser que la culpa al final es de las semillas a germinar, que vinieron de Egipto y venían con la contaminación puesta.

Aquí huele a gato encerrado, como unas semillas que se transportan secas pueden mantener viva unas E.coli que ni siquiera forman esporas.

En fin, me parece que ni saben de donde vino el brote ni lo quieren reconocer!

Un saludo

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ni lo saben ni lo quieren reconocer pero tardaron 2 min en culpar a los pepinos espanyoles, alguien tenia que
pagar el pato

serdo, a ver si hablamos y nos vemos aunque sea por skype!